domingo, 10 de febrero de 2008

Perspectivas...


Son algo intangible, jamás puedes tocar una perspectiva, sin embargo, sabes de su existencia, notas su presencia, y si no la notas, alguien lo hará por ti...


Las perspectivas nos dan puntos de vista diferentes, a veces acertados, a veces sólo conjeturas, quizá incluso nos den fuerzas, otras nos las quiten... y es que el mundo de las perspectivas (de ahora en adelante las llamaremos X) es complejo, absurdo, diferente...


X pueden ser ofrecidas por ti misma, que como buena neurótica exploras y extrapolas situaciones; también, si eres un ser aneurótico (¿existe esa palabra?), deben venir de tu alrededor para recordarte esas diferentes X. En cualquier caso, es como meterse dentro de un mundo de fantasía, dónde nada es lo que parece, y lo que parece nada es. Un secreto tras otro indescifrables todos ellos, que ocultan una verdad mayor, o quizá son sólo distracciones de una verdad ínfima.


Ayer ví la pelicula "El secreto de los hermanos Grimm". Y eso es X. Un cuento. Muchos cuentos. Fantasías. Leyendas. Verdades a medias. Verdades de mentira. Mentiras de verdad. Verdades completas que no quieren ser escuchadas. Verdades ocultas bajo una máscara.


Quiero quitar máscaras y descubrir que hay ahí fuera, entre el viento que azota mi ventana y el suelo que tiembla bajo la lluvia. Pero según quito máscaras descubro verdades que no quiero descubrir, o quizá las buscaba con tanta ansia, que no miré en el sitio adecuado. Y quiero quitar una máscara más que ninguna otra, pero para ello, deberé quitarme la mía.


X es esto. X es neuroticismo. X es verdad. X es mentira. X soy yo. X somos todos.