Dirección: Kimberly Peirce.
País: USA.
Año: 1999.
Intérpretes:
- Hilary Swank (Teena Brandon/Brandon Teena)
- Chloë Sevigny (Lana)
- Peter Sarsgaard (John)
- Brendan Sexton III (Tom)
- Alison Folland (Kate)
- Alicia Goranson (Candace)
- Matt McGrath (Lonny).
Guión: Kimberly Peirce y Andy Bienen
SINOPSIS: Basada en un hecho real, la película relata la vida de una persona con una crisis de identidad sexual. Se llama Teena Brandon y tiene cuerpo de mujer, pero se siente y aparenta ser un hombre. Cuando se descubre su situación, la discriminación y la intolerancia desencadenará la tragedia.
Hay películas que pasan desapercibidas ante el público: o bien porque la película no merece la pena, o bien porque trata temas de los que la gente no quiere saber nada. "Boys don't cry" pertenece al segundo caso. El tema de la transexualidad es algo "tabú", sobre todo en zonas como las que refleja la película, la América profunda. La transexualidad masculina es aún peor en cuanto a discriminación, ya que sufren el silencio y la invisibilidad.
No resalta por actuaciones en solitario memorables, sino que el conjunto actoral merece ser calificado de creíble. Y eso es difícil, teniendo en cuenta que, de no ser por los actores, la película podría haberse convertido en un melodrama de esos que dan por la tele los sábados por la tarde. Han conseguido dar verosimilitud a un hecho, por desgracia real, y denunciar socialmente unos actos que no deberían quedar impunes.
País: USA.
Año: 1999.
Intérpretes:
- Hilary Swank (Teena Brandon/Brandon Teena)
- Chloë Sevigny (Lana)
- Peter Sarsgaard (John)
- Brendan Sexton III (Tom)
- Alison Folland (Kate)
- Alicia Goranson (Candace)
- Matt McGrath (Lonny).
Guión: Kimberly Peirce y Andy Bienen
SINOPSIS: Basada en un hecho real, la película relata la vida de una persona con una crisis de identidad sexual. Se llama Teena Brandon y tiene cuerpo de mujer, pero se siente y aparenta ser un hombre. Cuando se descubre su situación, la discriminación y la intolerancia desencadenará la tragedia.
Hay películas que pasan desapercibidas ante el público: o bien porque la película no merece la pena, o bien porque trata temas de los que la gente no quiere saber nada. "Boys don't cry" pertenece al segundo caso. El tema de la transexualidad es algo "tabú", sobre todo en zonas como las que refleja la película, la América profunda. La transexualidad masculina es aún peor en cuanto a discriminación, ya que sufren el silencio y la invisibilidad.
No resalta por actuaciones en solitario memorables, sino que el conjunto actoral merece ser calificado de creíble. Y eso es difícil, teniendo en cuenta que, de no ser por los actores, la película podría haberse convertido en un melodrama de esos que dan por la tele los sábados por la tarde. Han conseguido dar verosimilitud a un hecho, por desgracia real, y denunciar socialmente unos actos que no deberían quedar impunes.
No a la transfobia. Sí a la igualdad y la tolerancia. Sí a películas como esta.